lunes, 30 de marzo de 2015

Podemos liberarnos del odio y el rencor??...

Hola a tod@s!

Cada día nos enfrentamos a un montón de cosas, muchas de las cuales consideramos como injustas, inapropiadas, o inmerecidas…
Basta con sentarnos a ver un informativo, cuando vemos lo que otros seres humanos hacen contra su prójimo, nos vamos cargando de energías negativas, de rabia, de rencor, muchas veces aparece sólo porque juzgamos, aunque muchas otras porque vivimos una situación negativa…

El rencor y el odio son dos sentimientos muy profundos que se arraigan y terminan desequilibrando nuestra mente y cuerpo…
Cualquier sentimiento negativo que experimentemos, sobre todo si está presente durante años, termina pasándonos la cuenta y volviéndose contra nosotros…

El odio y el rencor, a la larga, es un profundo resentimiento, y se basan en la necesidad de decir algo que jamás se ha podido expresar (o al menos no con la intensidad que la persona desearía)…
La persona, de cierta forma, se siente defraudada y comienza a generar dentro de su mente una serie de ideas negativas contra ese “enemigo”...
Con el paso del tiempo, estas ideas aumentan su intensidad y pueden provocar numerosos problemas, desde la ansiedad hasta enfermedades psicosomáticas (de hecho, incluso hay escuelas de pensamiento que afirman que el odio profundo es una de las causas del cáncer, pero esto aún no se ha demostrado científicamente)…

¿Cómo podemos eliminar el odio y el rencor?

- Habla con la persona que te ha ofendido y cuéntale cómo te has sentido. En el caso de que no puedas hacerlo, puedes utilizar la técnica de la silla vacía. En práctica, te colocas delante de una silla e imaginas que allí se encuentra esa persona. Dile todo lo que piensas. Te aseguro que se trata de una técnica con un elevadísimo poder catártico, te sentirás muchísimo mejor cuando termines...

-Acepta la imperfección. Tanto las personas como las organizaciones son imperfectas y no siempre pueden satisfacer todas tus necesidades y expectativas. Es importante aprender a vivir con eso.

-No te conviertas en juez. Detrás del odio y el rencor casi siempre se esconde un juicio y la sensación de que eres mejor que la otra persona (la que cometió el error). En realidad, todos somos diferentes. Aprender a juzgarnos solo a nosotros y no ir por la vida vistiendo la toga del juez no solo te ayudará a eliminar estos sentimientos negativos sino que te hará mucho más feliz.

-Acepta que todo cambia. El mundo está en continua transformación y las personas con él. Quizás no te has dado cuenta de que esa persona ha cambiado, solo porque estás demasiado imbuido en la imagen que te has construido de él y que ya no se corresponde con la realidad.

-Aprende a dejar ir… En la vida nos pueden pasar muchas cosas que consideramos injustas. A veces, lo mires por donde lo mires, es difícil encontrarle el lado positivo…

Pero sólo el perdón, que no es lo mismo que aceptar la situación, consigue dejar ir toda esa rabia y rencor, que en definitiva, nos sigue castigando a nosotros mismos…

Como dijo M. Twain… “El perdón es la fragancia que deja la violeta sobre el talón que la ha pisado”…

Por nosotros… liberemos nuestra alma de rencor…
Vale la pena intentarlo... Aunque reconozco en que hay situaciones más complejas que otras...

Hasta la próxima!!




                                                         Fuente: rinconpsicologia.com

lunes, 23 de marzo de 2015

Las emociones... son causas de enfermedad?

Hola a tod@s!

Últimamente he escuchado en reiteradas ocasiones que nuestras dolencias físicas derivan de nuestras emociones… Entonces, ante todo, una enfermedad o dolencia, es un llamado de atención de nuestro cuerpo, para que solucionemos un sentimiento que nos afecta, manifestándose en enfermedad… Veamos cómo funciona…

Los dolores físicos tienen que ver con el espacio, pertenecen a un lugar…
Los dolores psíquicos pertenecen al orden, no del espacio, sino del tiempo…
La emoción es la bisagra o nexo que une lo físico con lo psíquico…
Cuando activamos nuestra conciencia y accionamos para transformar o liberar la emoción, estamos generando una doble acción: una acción libera o transforma a nivel físico y la otra a nivel psíquico.

Las emociones que sofocamos, reprimimos o censuramos sin expresarlas libremente (en cualquier aspecto de nuestra vida), con el tiempo se convierten en síntomas en nuestro cuerpo... 
Las enfermedades, molestias o desequilibrios (dolores de cabeza, digestiones irregulares, mareos, molestias articulares, contracturas, deficiente circulación sanguínea, etc.) son el efecto de emociones sofocadas, no expresadas…
La incertidumbre, ansiedad, temor, enojo, angustia, desasosiego, apatía etc., son disfunciones psíquicas que siempre están vinculadas con acontecimientos que nos han dejado huellas en algún lugar del inconsciente…

Comenzar a dialogar con nuestro cuerpo, observando, escuchando y sintiendo, nos permite darnos cuenta de qué se trata lo que hemos reprimido o estamos reprimiendo.
A través del lenguaje corporal es posible liberar y mutar las emociones que fueron la causa de nuestro posible malestar físico. 
La geografía corporal tiene un orden, es como un gran mapa en el cual no hay divisiones políticas, es un todo, cada parte está intensamente ligada a las demás, ya que una zona afectada desestabiliza al todo…

Cada zona está vinculada a una emoción, si un territorio está escaso de energía y su funcionamiento es inestable o incompleto afecta a la energía de todo el conjunto. En este punto es imprescindible tener en cuenta que  así como en la vida todos formamos parte del todo, lo que a cada uno le  afecta también afecta al resto, sólo que, muchas veces no somos muy conscientes de la influencia de nuestra parte en el holograma de la vida, y se nos escapa tener en cuenta al otro. En el cuerpo físico, la diferencia es que, lo que lo afecta se manifiesta rápidamente, desequilibrando a todo el mapa corporal conduciéndonos  a tomar conciencia. En ese desajuste es la enfermedad quién toma la delantera para comunicarnos que hay algo que no está funcionando adecuadamente. La enfermedad se convierte en el medio que nos permite ser conscientes de nuestro cuerpo y de la influencia que tiene sobre él, aquello que no pudimos resolver emocionalmente.

Aquí una breve descripción de las 7 Emociones más importantes, que los Chinos antiguamente han descrito como las causantes internas que pueden conducirnos al desequilibrio, que traducido al cuerpo físico se convierten en enfermedad, y que también son las causas que constituyen la falta de equilibrio psíquico…

La alegría
Es un factor saludable pero una experiencia intensa y excesiva de alegría perjudica el Corazón, una alegría inmensa agota el corazón. Aquí se incluye el placer de causar daño a los demás. Esto nos demuestra que el equilibrio es necesario en todos los órdenes de la vida.

La ira
Perjudica al Hígado, cuando nos enojamos el hígado funciona en exceso. La ira produce aumento de la energía provocando distorsión en la visión, mareos, vómitos y dolor de cabeza. El hígado regula el flujo sanguíneo que está íntimamente vinculado al corazón, es por eso que  las personas que se enojan fácilmente son propensas a sufrir enfermedades cardíacas.

La melancolía
Perjudica al Pulmón. Cuando nos preocupamos demasiado a continuación sigue la melancolía provocando pérdida de apetito, tos, vómitos, estreñimiento, insomnio, dificultades sexuales. Se bloquea o estanca el flujo de la energía. Las personas  melancólicas o las que se ven sometidas a una gran preocupación son propensas a sufrir enfermedades pulmonares.

La angustia:
Perjudica al Bazo. Cuando pensamos demasiado o estamos muy ansiosos el sistema del bazo y el estómago se verán afectados ya que se congestiona el proceso digestivo, produciendo pérdida de apetito,  flatulencia en el pecho o el abdomen, mareos, dolor de cabeza, insomnio, pérdida de memoria. Cabe destacar que la preocupación es excesivamente perjudicial para el bazo.

La tristeza:
Perjudica al Corazón y al Pulmón. Llevándonos a perder el entusiasmo y la confianza en la vida, agota la energía estresando el corazón. Produciendo pérdida de apetito, insomnio, tos, en algunos casos perdida de sangre en la orina. El amor no correspondido suele ser una de las causas. La ansiedad es una de las consecuencias, es por eso que muchas personas fuman.

El miedo
Perjudica los Riñones, hace que la energía se agote ( por eso es tan importante el insumo de agua).  Suele  paralizarnos y nos hace sentir extremadamente vulnerables. Produciendo diarrea involuntaria, polución nocturna, convulsiones y problemas sexuales.

El susto:
Perjudica al Espíritu y al Corazón, dispersando el espíritu y malgastando la energía. Produciendo palpitaciones, falta de concentración, convulsiones y desequilibrios en la psiquis. También afecta a la Vesícula y a los Riñones…

La medicina oriental desde siempre pude ver lo correlativo entre estas emociones y cómo afecta al organismo…
La mente y el cuerpo, son considerados un todo orgánico…
Si no nos sentimos bien físicamente, nuestro rendimiento intelectual se verá afectado del mismo modo que nuestra salud física se ve afectada cuando estamos afligidos mental o emocionalmente…

“El Universo nos apoya totalmente en todo lo que decidimos pensar y creer, el poder Universal jamás nos juzga ni nos critica”… Louise Hay

Creo que vale la pena parar un poco y conocernos… de nuestro diálogo interior surgirá las respuestas que necesitamos…

Hasta la próxima!!





                                           Fuente: Claudia Quesada,  dimension12.com

                                           Imagen: mediamercola.com

lunes, 16 de marzo de 2015

¿Qué tan agradecido eres?...

Hola a tod@s!

Cada día recibimos un conjunto de bendiciones… favores, que muchas veces viene de las personas menos esperadas, tal vez, desconocidos, que nos ayudan en determinado aspecto de nuestra vida… Pero… cuál es nuestro sentimiento al respecto?...
Ciertamente no basta con decir un frío “gracias”, la gratitud va más alla…
Es mucho más que una emoción, puesto que puede ser también una tendencia a ver lo bueno que nos trae la vida… Para estar agradecidos por algo, primero tenemos que darnos cuenta de que lo tenemos y nos es importante…

A menudo damos por sentado las cosas buenas que tenemos y nos centramos más en aquellas que nos hace falta, o en todo lo malo que hay en nuestras vidas y cómo hacer para liberarnos de eso…
Dar Gracias tiene numerosos beneficios: como una mayor felicidad, relaciones más satisfactorias y paz mental. La gratitud se considera una virtud en casi todas las culturas.
Tiene también una gran capacidad para producir cambios en las personas…
Expresar gratitud es un camino hacia una mayor felicidad. Pero algunas personas no  tienen la costumbre de expresar gratitud, por tanto, es una virtud que debe ser aprendida y cultivada…
¿Cómo eres tu?... Sabes dar gracias por las cosas buenas, o eres de los que ven siempre el medio vaso vacío?...

Efectos de la gratitud

-Aumenta la autoestima y la sensación de valía personal
-Incrementa el comportamiento ético
-Ayuda a construir vínculos con los demás
-Ayuda a afrontar el estrés, trauma y adversidad
-Inhibe las comparaciones negativas con los demás
-Nos ayuda a adaptarnos a nuevas circunstancias
-Ayuda a combatir las emociones negativas
La gratitud puede expresarse de diversas formas. Puedes sentirte agradecido muchas veces a lo largo del día por las pequeñas cosas que te suceden, aunque sea algo tan pequeño y mundano como encontrar aparcamiento con facilidad, o tener un buen día en el trabajo, o que tus hijos pongan la mesa sin pelearse o que florezca una planta en tu balcón…
También puedes dar gracias a los demás, no solo por hacerte algún favor, sino tan solo por ser parte de tu vida, escuchar tus problemas o no rechazarte cuando tienes un mal día…
Expresar gratitud no tiene nada que ver con la religión o la creencia en dios. Puedes estar agradecido a la vida, al mundo, a tu ser interior, a todo en general o a nada en particular, tan solo es esa sensación de agradecimiento que no es necesario dirigir hacia nada ni nadie en particular…

¿Como aumentar tu gratitud?

Si quieres aumentar los sentimientos de gratitud y conocer sus beneficios, estas son algunas de las cosas que puedes hacer:
- Proponte prestar más atención a cualquier momento de tu vida por el que puedes dar gracias…
- Utiliza un diario de gratitud, donde escribir cada día todas las cosas buenas que te han pasado, por pequeñas que sean… Esto hace que tu atención se centre más en lo positivo de tu día a día y te ayude a ser consciente de las cosas por las que puedes estar agradecido…
-Escribe una carta de gratitud a una persona a quien te sientas agradecido por algo. No es necesario que envíes esa carta, aunque enviarla o dársela a esa persona puede aumentar los efectos positivos…
-Busca una persona con la que practicar la gratitud… Consiste en ponerte de acuerdo con alguien para que se cuenten que les suceden… Cada uno debe procurar escuchar al otro y sentir su alegría y gratitud, así también practicarán el sentimiento de empatía…
-Expresa gratitud a los demás… Diles directamente lo que agradeces todo lo que hacen por ti, sus detalles, su amabilidad, o el efecto que tienen en tu vida…
- Concéntrate en el sentimiento de gratitud y trata de evocarlo… Piensa en algo por lo que te sientes muy agradecido y cuando aparezca ese sentimiento, concéntrate en él, siéntelo plenamente durante un rato, deja que invada todo tu ser y apréndetelo… Resultará muy beneficioso adoptarlo…
Recuerda que puedes ir caminando por la calle y estar experimentando ese sentimiento de gratitud solo por caminar al aire libre, porque salga sol, o porque llueve manso, porque llegas a fin de mes, porque tienes a alguien importante en tu vida, por cualquier cosa, porque mientras lo estés sintiendo serás más feliz y te sentirás mejor contigo mismo, con los demás y con el mundo a tu alrededor…
Esto cambiará tu manera de ver la vida… y tu enfoque personal…
Espero que lo pruebes y compartas tu experiencia…

Hasta la próxima!!


Fuente: motivacion.about.com

Imagen: joya937.mx

miércoles, 11 de marzo de 2015

Tienes una buena salud emocional?...

Hola a tod@s!

¿Qué es la buena salud emocional?

Las personas con buena salud emocional están conscientes de sus pensamientos, sentimientos y comportamientos. Han aprendido maneras saludables para afrontar el estrés y los problemas que hacen parte de una vida normal. Se sienten bien consigo mismo y tienen relaciones sanas…
Claro que a veces, pueden ocurrir muchas cosas en la vida, que pueden perturbar tu salud emocional y provocar sentimientos fuertes de tristeza, estrés o ansiedad…

Estas cosas pueden ser:
-Perder tu trabajo por causa ajena a tu desempeño
-Tener un hijo que se va, o que regresa, a la casa
-Estar de duelo por la muerte de un ser querido
-Divorciarte o casarte
-Sufrir una lesión o una enfermedad
-Ser promovido en el trabajo
-Tener problemas de dinero
-Mudarte a una casa nueva
-Tener un bebé

Algunos cambios favorables pueden ser tan estresantes como los cambios desfavorables… Por lo que cualquier cosa que nos saque de nuestra “rutina” nos puede perturbar en lo emocional…
¿Cómo pueden afectar mi salud mis emociones?
Tu cuerpo responde a la manera como piensas, sientes y actúas.
Esto con frecuencia se denomina la conexión entre la mente y el cuerpo…
Cuando estás estresado, ansioso, enojado, tu cuerpo trata de decirte que algo no anda bien…
Esto puede verse por una presión arterial elevada o una úlcera estomacal, que puede desarrollarse después de un evento estresante, tal como la muerte de un ser querido… Los siguientes síntomas pueden ser evidencia de que tu salud emocional está desequilibrada:

-Dolor de espalda
-Cambio de apetito
-Dolor en el pecho
-Estreñimiento o diarrea
-Resequedad en la boca
-Cansancio excesivo
-Malestares y dolores generalizados
-Dolores de cabeza
-Presión arterial elevada
-Insomnio
-Mareos
-Palpitaciones, es decir, una sensación de que su corazón late aceleradamente
-Problemas sexuales
-Sensación de "falta de aire"
-Tensión en el cuello
-Malestar estomacal
-Subir o bajar de peso

La mala salud emocional puede debilitar su sistema inmune haciendo que te den más resfriados y otras infecciones durante épocas emocionalmente difíciles.
Además, cuando te sientes “mal” puedes dejar de cuidar de ti, de tu alimentación, de tener ganas de ejercitarte, etc.

¿Porqué mi médico necesita saber acerca de mis emociones?
El médico no siempre puede darse cuenta de que estás estresado, ansioso o perturbado simplemente con mirarle… Es importante ser honesto con tu médico si estás teniendo un mal momento, en lo emocional, ya que esto afecta directamente en tu salud corporal…
Primero, el médico tendrá que asegurarse de otros problemas de salud no te están causando esos síntomas físicos.
El médico te puede sugerir maneras de tratar tus síntomas físicos mientras ambos cooperan para mejorar tu salud emocional...
Si tus sentimientos negativos no desaparecen y si son tan fuertes que te impiden disfrutar la vida, es sumamente importante que hables con tu médico…

¿Cómo puedo mejorar mi salud emocional?
Primero, trata de reconocer tus emociones y comprender por qué las estás teniendo. Descifrar las causas de la tristeza, estrés y ansiedad en tu vida te pueden ayudar a manejar tu salud emocional. 

Sigue estos consejos útiles:
Expresa tus sentimientos de manera apropiada. Está bien dejar que tus seres queridos sepan cuando hay algo que te está molestando… Sin embargo, ten en cuenta que tus familiares y amigos pueden no ser capaces de ayudarte a lidiar con dichos sentimientos...
En estos momentos, pídele a alguien que no esté involucrado en la situación (tal como tu médico de familia, un asesor psicológico o un consejero espiritual), consejo y apoyo para ayudarte a mejorar tu salud emocional…
Vive una vida balanceada… Trata de no obsesionarse con los problemas de trabajo, escuela o casa que puedan conducirte a sentimientos negativos. Esto no significa que pretendas que estás feliz cuando te sientes deprimido, ansioso o perturbado.
Es importante lidiar con estos sentimientos negativos pero también tratar de enfocarte en las cosas positivas de su vida…  Algunas investigaciones han demostrado que tener una actitud positiva puede mejorar la calidad de vida y también afectar positivamente tu salud. También puedes  necesitar buscar maneras para deshacerse de algunas cosas en tu vida que te hacen sentirte abrumado. Hazte tiempo para hacer las cosas que disfrutas!.
Calma tu mente y tu espíritu… Los métodos de relajación tales como la meditación son maneras útiles para balancear las emociones. La meditación es una forma de pensamiento guiado…Por ejemplo, usted puede hacerla haciendo ejercicio, estirándose y respirando profundamente…
Cuídate de ti mismo… Para tener buena salud emocional, es importante cuidar tu cuerpo teniendo una rutina regular para comer comidas saludables, dormir lo suficiente y hacer ejercicio para aliviar la tensión acumulada. Evita comer en exceso...
Y por sobre todo, trata siempre de ser feliz…
Hasta la próxima!

Fuente: familydoctor.org

Imagen:www.cofarnat.com

lunes, 2 de marzo de 2015

Identificando nuestro malestar... Relaciones Toxicas...

Hola a tod@s!

Hoy vamos a hablar de algo que a todos en algún momento nos ha afectado, ya sea en lo personal, o porque lo hemos visto dentro de nuestro círculo de amistades o conocidos…
Se trata de las Relaciones Tóxicas… las que se envuelven en nuestra vida casi sin percibirlas, y cual enredadera va anulando nuestro ser, hasta el punto de castrarlo, impidiendo nuestra realización personal…
Pero… ¿Qué es una relación tóxica?

Son relaciones en las que quedamos atrapados por una especie de red negativa, no solo se refiere a relaciones amorosas sino que pueden ser relaciones de amistad o familiares.
Las relaciones tóxicas son aquellas que nos hacen sentir mal, cambiar de formas que no nos gustan, nos alteran de manera que no podemos controlar o destruyen quienes en verdad somos. Nos hacen infelices… Y además de las que es muy difícil salir…

Típicamente son relaciones en las que una persona es dominante, o sumisa, o hay problemas de comunicación, manipulación, mentiras o chantajes. Son relaciones en las que una o ambas partes sufren pero a las que no sabemos poner fin.
Existen diferentes tipos de estas relaciones tóxicas que se tendrían que evitar:
Básicamente mostraremos las conductas características de relaciones, que a la larga, pueden convertirse en tóxicas… si estas en una relación como estas, sería conveniente que las identifiques, y soluciones antes de verte envuelta en su toxicidad…

 Relaciones en las que solo está a cargo una persona: Si solo una persona ejecuta (lleva) la relación, la relación no es sana y no prosperará adecuadamente. A veces es fácil involucrarnos con una persona que tome el control de las cosas, puede parecer fácil y cómodo que cojan las riendas de nuestra vida, puede que notemos menos presión así. El problema es que esto no es opcional, es decir si tu le das las riendas de tu vida a otra persona, lo más probable es que pierdas el derecho a opinar sobre que hace con ellas. Cuando quieras recuperar el control será muy difícil y la relación empeorará. En estos casos la persona pierde autonomía, independencia, autoestima y autoconfianza. Nunca debes sentirte sin poder o atrapado/a en una relación, eso en realidad no es una relación. Las relaciones implican libertad e igualdad de responsabilidades para ambas personas, cooperación entre las dos personas implicadas. La relación será tan fuerte como sean los dos individuos por separado dentro de la relación. Habrá más crecimiento personal para los dos. Intentar controlar a alguien o que te controlen no lleva a ningún lado.

Relaciones que tienen la función de “completarte” Por mucho que en las películas nos inculquen que cuando encontremos a “LA” persona esta nos llenará, nos sacara de la miseria y el aburrimiento y nuestra vida cambiará y será maravillosa, nos elevará a un estado de plenitud y felicidad, lo cierto es que esto es algo que debemos conseguir por nosotros mismos y llevarlo luego a la relación. Una relación no debe servir o utilizarse para suplir carencias personales, esto hace que luego seamos dependientes y no recorramos el camino de crecimiento personal, no evolucionemos y mejoremos como personas por nosotros mismos, y queramos o no, es una responsabilidad y un peso muy grandes para la relación y la otra persona (si estamos mal es culpa de la otra persona y esperamos que ella lo solucione). Suelen ser relaciones en las que luego no se toleran separaciones temporales ni estar solos. No es la responsabilidad de nuestra pareja rellenar esos vacíos existenciales, es un trabajo personal de cada uno. Si no estas bien contigo mismo eso se verá reflejado negativamente en la relación. Uno debe crear su propia felicidad antes de poder compartirla con otros.

Relaciones co-dependientes Este tipo de relación es algo similar a la del punto 1, pero aquí son ambas personas las que son pasivas y dependientes, perdiendo su individualidad, no es el caso de una dominante y otra más sumisa. Aquí ambas personas necesitan de la aprobación del otro para llevar a cabo cualquier acción, priorizan las necesidades del otro sobre las propias. La otra persona siempre es la responsable de cómo nos sentimos, todo pasa por ella.  Nos diluimos con la otra persona y la relación se vuelve adictiva. Si el otro se encuentra mal de repente nuestras necesidades personales desparecen y solo pensamos en hacerla sentir bien. ¿El mayor problema? Suelen llevar a una acumulación de resentimiento, aunque hayamos sido nosotros que hayamos decidido valorar las necesidades del otro por encima de las nuestras, luego eso quema. La vida se convierte en mirar por el bienestar de la otra persona las 24 horas del día. Ambos miembros de la pareja deberían responsabilizarse de sus propias emociones y saber regularlas sin la ayuda del otro. Una cosa es ser de apoyo para otra persona y otra es estar obligado a todas horas. En este tipo de relaciones uno se siente obligado a estar cuidando a la otra persona y pasar todo por ella.

Relaciones basadas en expectativas  idealizadas: La perfección no existe, si amamos a alguien debe ser con sus “defectos” y con sus mas y sus menos. No es sano intentar “arreglar” a las personas o cambiarlas. De hecho cuanto menos esperes de alguien que amas más feliz serás. Las expectativas pueden ser muy traicioneras. Nadie actuará siempre como nosotros esperamos, no son nosotros y por lo tanto vivirán y actuaran a su manera. Vivir una relación por el “cómo debería ser” y no como es, lleva a frustración, sufrimiento y tristeza. No debemos tener expectativas grandiosas e irreales ni tampoco pensar que la otra persona puede cambiar (ni intentar hacerlo) para “mejorar” la relación.

Relaciones en las que lo pasado se utiliza para justificar el presente Si estas en una relación en la que continuamente se te culpa por el pasado, la relación es tóxica. Si ambos lo hacen la relación se convierte en una batalla por ver quien la “cagó” más y por lo tanto quien debe disculparse. Cuando utilizas lo que ha hecho mal la otra persona en el pasado para justificar tu conducta en el presente lo que estamos haciendo es utilizar la culpa y el resentimiento para manipular a la otra persona (para que se sienta mal en el presente), aparte de perder de vista el problema actual. Al final la relación se convierte en un constante esfuerzo por ambas personas para probar que son “menos culpables” o menos “malos” que el otro, en lugar de intentar ambos ser mejores para el otro. Debes aceptar que para estar con alguien tienes que aceptar sus errores y su pasado. Si algo nos afectó tanto en el pasado, entonces ese era el momento para trabajarlo, no ahora. El pasado pasado es, y pasado debe ser.

Relaciones basadas en mentiras continuas En las relaciones una omisión es como una mentira, las relaciones se basan en la confianza, abrirse a la otra persona y conocerse mutuamente. Ocultar información relevante solo debilitará la relación. Es cierto que se puede reparar la falta de confianza pero esto es muy difícil y requerirá del esfuerzo de ambas partes. De todas formas, al final la verdad siempre se sabe. La persona nos mentirá hasta que consiga que esa mentira se convierta en nuestra realidad, no debemos entrar al juego, si descubres una mentira, confróntala. Las personas que mienten suelen repetir las mentirás hasta que consiguen hacerlas realidad, no participes en esto. Para poder reparar una falta de confianza primero hay que poder reconocer la mentira. El perdón y la reconciliación no ocurrirán hasta que se admita la mentira.

Relaciones en las que el perdón no tiene cabida y en las que no hay intención de reparar la confianza Esta está en relación con el punto anterior. La confianza se puede reparar, pero mantenerse en una relación en la que no hay intención de repararla no tiene sentido. En casi cualquier relación a largo plazo habrá un problema de confianza o alguna mentira en algún momento, no entender que esta se puede reparar si ambas personas trabajan duramente en su propio crecimiento persona aplicando luego este a la relación convertirá la relación en una relación tóxica para ambos.

Relaciones en las que la comunicación es pasivo-agresiva Por ejemplo cuando en lugar de comunicar abiertamente como nos sentimos jugamos con indirectas, o cuando la comunicación es hostil e intenta manipular como se siente la otra persona. Hacer cosas sutiles para molestar a la otra persona hasta que nos presta la atención que queremos. Las relaciones se basan en una comunicación abierta y sincera, si la otra persona en la relación nos juzga o crítica cuando nos abrimos puede que nos volquemos en actitudes pasivo agresivas. Puede que la otra persona no esté de acuerdo en lo que piensas pero en las relaciones fuertes se alcanza un compromiso, la otra persona accede a apoyarnos sin necesariamente tener que estar de acuerdo obligatoriamente a pensar igual que nosotros.

Relaciones gobernadas por el chantaje emocional Esto se refiere a aplicar un castigo emocional cuando la otra persona no hace exactamente lo que queremos. Al final la otra persona accede a comportarse de otra manera a causa del chantaje.  Se soluciona como en el punto anterior con una mejor comunicación. Los sentimientos y emociones se pueden comunicar pero de una manera sana y sincera sin atacar a la otra.

Relaciones que quedan en un segundo plano Las relaciones requieren que se les dedique tiempo y esfuerzo, si no se las cuida se marchitan. Es importante dedicar tiempo de calidad a la relación, compartir actividades solo con la otra persona que os enriquezcan como pareja. La otra persona (y la relación) requieren de tu presencia, atención y tiempo.
Sólo con identificar todo lo anterior, evitarás tener una relación tóxica y podrás tener la libertad de elegir otra, que en verdad te depare una vida más sana y de mayor felicidad!...

Espero que esto te ayude…

Hasta la próxima!!


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